miércoles, 7 de septiembre de 2016
Palestina y las granjas de peces
En la Franja de Gaza las cosas nunca son fáciles. El conflicto está siempre latente y muchas veces presente en forma de violencia. Uno de los principales inconvenientes radica en que en esa región de Palestina, dependen de la importación de alimentos desde Israel para poder comer. (Aquí es donde uno se pregunta, ¿cómo puede ser que este tipo de problemáticas políticas extremas, siempre tenga un beneficiario económico'). La pesca en esta zona es muy difícil, a la zona de exclusión impuesta por Israel, se suman los riesgos que corren los pescadores (estoy tentado a decir "Los herederos de Pedro"), tanto en el propio mar como con la propia autoridad israelí. Una de las formas que los palestinos encontraron para poder suplir al mercado con peces frescos, es la implantación de granjas de peces. Si bien aún hay pocas granjas que deben afrontar diferentes complicaciones (la comida y los huevos para la siembra son importados de Israel; la electricidad no es constante debido a las restricciones que impone Hamas), la idea y el éxito de las que ya están funcionando, ilusiona y va direccionando el camino hacia lograr la sustentabilidad alimentaria. En una zona donde la violencia es cotidiana, la seguridad alimentaria es siempre un problema; la resolución puede venir por el lado de la creatividad, como lo muestra este ejemplo. Quien sabe, capaz que hasta la solución política necesaria y urgente, puede tener un pilar en la sustentabilidad alimentaria. Más información aquí.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario